Humanos que trabajan como máquinas

Si envías a un humano a hacer el trabajo de una máquina muy probablemente el humano lo hará peor . Aparte de las limitaciones físicas y cognitivas comunes a todos los miembros de nuestra especie nos encontraremos con el riesgo de que sucedan “errores humanos”, además de una mayor variabilidad en la productividad y en la calidad del trabajo. Lo explicaba recientemente Enrique Dans en un post donde comentaba el caso de Uber, que ha decidido controlar el “estilo al volante” de sus conductores a través del acelerómetro, el giroscopio y el GPS de sus teléfonos. Un método que permitirá a esta empresa ahorrarse discusiones con sus usuarios basadas en percepciones subjetivas sobre si la conducción de sus chóferes es más o menos brusca. Una solución que podría servir en el futuro para estandarizar la forma en que sus conductores manejan sus vehículos y que, en segunda derivada, puede ayudar a Uber a definir el algoritmo con que programará los taxis sin conductor que pondrá en circulación