16 enero 2008

Cultura y confianza

por Santi Garcia

La línea que separa la vida profesional de la vida privada no es tan clara en China y en Turquía como en los países occidentales. Ésta es una de las conclusiones de un estudio realizado por el profesor Tan Hwee Hoon, de la Singapore Management University, y los profesores Arzu Wasti y Selin Eser de la Universidad Sabanci de Estambul.

El estudio analiza el impacto que las diferencias culturales ejercen sobre las relaciones de confianza que se establecen en las organizaciones. La mayor parte de los estudios realizados hasta la fecha sobre este tema han sido desarrollados por académicos occidentales -principalmente norteamericanos- y suelen centrarse en la confianza («trust») que un líder inspira en sus colaboradores de diferentes culturas y nacionalidades. Sin embargo, esta encuesta sabe a fresco en la medida que incluye otras perspectivas, -como la confianza que los jefes depositan en sus colaboradores o las relaciones que se establecen entre iguales-, y porque ha sido realizada por dos instituciones de economías emergentes.

Los resultados obtenidos constatan que las culturas de ambos países, de marcado carácter colectivista, provocan que la línea de separación entre el ámbito personal y el ámbito profesional se difumine. Además, en ambas naciones se aceptan las jerarquías, la distribución desigual del poder, se prefiere trabajar con reglas y estructuras claras, y no se tolera bien la ambigüedad ni la incertidumbre. Asimismo, tanto en Turquía como en China los comportamientos paternalistas y benevolentes son importantes para que un jefe se gane la confianza de sus subordinados, mientras que fiabilidad y conformidad son los atributos que determinan que un jefe deposite su confianza en un colaborador.

Pero también hay características que diferencias a ambos países. Tal vez la más destacable sea la mayor orientación al desempeño de los chinos, que determina que éstos, a diferencia de los turcos, den también mucha importancia a la competencia profesional de la persona -ya sea jefe o compañero- a la hora de otorgarle su confianza.